Las aves en tiempos de COVID-19 03/04/2020

La declaración de estado de emergencia y el subsiguiente confinamiento de gran parte de la población para intentar frenar la propagación del COVID-19 ha supuesto para muchos de nosotros algo a que no siempre es fácil enfrentarse. Desde diversas instituciones dedicadas al estudio de las aves se han planteado multitud de proyectos para, en primer lugar, tener a la población ocupada pero también para intentar recopilar información sobre cómo afecta nuestro confinamiento a sus hábitos. En Catalunya el Institut Català d’Ornitologia ha incentivado diferentes propuestas para observar aves desde los balcones o terrazas de nuestros domicilios mientras que SEO/BirdLife ha iniciado una campaña de divulgación a través de las redes sociales sin precedentes.

¿Pero qué opinan los científicos sobre el hipotético cambio de comportamiento por parte de las aves a raíz del abandono del espacio por parte de los humanos? Pues bien, de entrada, parce obvio que las aves, pero también otros animales, han aprovechado nuestra ausencia para ocupar playas, pueblos y ciudades. Así, las redes están llenas de imágenes sorprendentes de todo tipo de animales en entornos para nada habituales. Por otro lado, algunos aventuran que esta temporada de cría será muy productiva sobre todo para aquellas aves que anidan en entornos urbanos y suburbanos. En este sentido John Fitzpatrick, director del Cornell Lab of Ornithology en EEUU asegura que la ausencia de molestia provocara un incremento de la población reproductora de algunas especies. Por otro lado, otro efecto colateral de la situación que estamos viviendo es el aumento de la actividad cantora de muchos pájaros. Al parecer en ambientes ruidosos las aves reducen su actividad cantora debido a la imposibilidad de superar en decibelios el ruido del ambiente en el que viven. En estos momentos, ellos juegan con ventaja del inesperado silencio que reina en pueblos y ciudades.

En el marco del proyecto BiObserva no se prevé que se aprecien cambios significativos en el comportamiento de las aves ya que al tratarse de entoRnos controlados la actividad humana no variará demasiado con respecto a la etapa pre-coronavirus. Aun así, los resultados de las jornadas de muestreo podrán, en el futuro, arrojar algo de luz sobre esta cuestión.

¡Buen pajareo y salud para todos!